Homenaje a los Hombres Lagarto

Esta entrada va en dedicatoria a mis tropas, mis poderosos reptiles que nunca me fallan. Vaaale, se que un inicio así puede causar confusión así que me explicaré: el día 21 de septiembre comenzó un torneo de Warhammer y como segundo mejor de Plasencia y tercero de Extremadura no pude resistirme al reto, así pues me apunté.

Eran dos batallas de entre una hora y dos horas y media de duración.A los que más temía enfrentarme era al Caos, los Orcos y los Altos Elfos. Unos por ser muy duros y acorazados, otros porque me superan numéricamente en una proporción de 3 a 1, y los otros porque son unos gays, disparan mucho y disipan la magia. El torneo empezó y mi suerte empezó fallándome ya que mi primer combate fue con el Caos. Le vencí por Masacre (el mejor resultado posible) y además vinieron mi hermano y una amiga a animarme, por lo que tenía mayor motivación para ganar. Por ahora las cosas iban bien. Ahora el problema es que el sabado 22 nos enfrentaríamos los 4 que optuvimos una Masacre: los dos ejércitos de Altos Elfos, otro con Hombres Lagarto y yo. El sabado, Fortuna me sonrió de nuevo ya que me enfrenté a mis hermanos lagarto, por lo tanto en ese ejército no había misterios ni sorpresas. Tras 2 horas y media de batalla, al final, y tras sufrir bastantes bajas y momentos de desesperación, me alcé con la victoria con otra Masacre. ¡El torneo fue mío! ^^

A continuación repaso de tropas y su homenaje:

• A mis valientes guerreros saurios, que se mantuvieron firmes ante las adversidades y causaron pánico a las tropas enemigas con su poderoso rugido y si impasibilidad ante las peores situaciones.

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• A mis rápidos y ágiles eslizones, que consiguieron, no solo causar más bajas de las que pensaba con su cerbatana y sus dados envenenados, sino que además soportaron cargas imposibles para ellos y retrasaron al enemigo.
• A mis guerreros de gélidos, que sin su carga arrolladora nunca hubiese optenido la victoria y que gracias a su rapidez pude llegar al combate antes que el enemigo.
• A mis queridas Salamandras, que con su escupitajo flamígero causó terror entre aquellos que eran impactados y con su terrible mordisco muchos enemigos (y amigos ya que también se comía algunos de sus cuidadores ^^U) cayeron.
• A mi chamán eslizón Tlektlan (Leklan para facilitar su lectura, jeje), que con su magia del Cielo destrozó las filas enemigas mediante la invocación de rayos y meteoritos.
• A mi saurio escamadura a pie Bor-Gazor, el cazador de héroes, que mató a todos los líderes enemigos adelantándose a las tropas princpales. Nadie sobrevivió a su carga, ni siquiera unos Caballeros Elegidos del Caos, la unidad más dura del juego.

• Y en último lugar a mi general, a mi saurio escamadura Selbor-Zechnas montado en su fiel gélido Nai-Gar. A pesar de que no hizo falta que combatiera mucho, ya que la infantería de saurios podían hacerlo solos, su sola presencia hizo estremecerse de miedo gracias al ir montado en una enorme bestia de combate y a su gigantesca arma que chorreaba un líquido extraño. Todos los que fueron atacados por esta macana a dos manos murió de la forma más horrible que hay: un veneno que consume el cuerpo lenta y dolorósamente.

Para terminar, un saludo a todos los que combatieron en el torneo, tanto a los que se enfrentaron a mí como a los que no lo hicieron, tanto a los que me animaron como a los que no, pero en especial a mi hermano y mi amiga que estuvo conmigo en las dos batallas y me apoyaron al 100%.

Y aprobecho esta entrada para retar a todo el que se atreva a enfrentarse a mis queridos lagartos, aunque no creo que tenga ninguna posibilidad, jeje (viva la vanidad ^^). ¡Hasta más vernos! ¡Y vivan los Hombres Lagarto! ^^